POR NATASHA NIWIESKIKWIAT – Clarin
ETIQUETAS
01/12/12 – Clarin
La temporada de verano preanuncia más tensiones por las Malvinas, esta vez alrededor de la industria turística de los cruceros, que esta semana ya tuvo su escalada. Ayer se montó una batalla informativa entre el archipiélago y Tierra del Fuego, donde la prensa reportó que un tercer crucero había suspendido su paso por las islas a raíz de las presiones continentales en medio del reclamo de soberanía y la tensión latente con el Reino Unido. Tras la difusión de esa versión por el Diario del Fin del Mundo, la agencia Mercopress reportaba una nota breve con la intención de mostrar que el barco estaba amarrado en el la capital de las Malvinas, y los pasajeros estaban disfrutando del sol y la fauna marina.
La nueva escalada surge en gran parte de la puesta en vigencia de la llamada “Ley del Gaucho Rivero”, que está vigente en cinco provinciasy establece el impedimento de amarre a barcos británicos o con banderas de conveniencia. Si bien busca afectar a la industria petrolífera, ya hubo cruces por quedar afectado el turismo de cruceros. El Gobierno ha mostrado cierta dualidad con su aplicación, no la condena pero tampoco la promueve.
Las versiones de ayer se referían al crucero Seabourn Sojourn, que según el medio fueguino –citando como fuente al armados del buque– suspendió su viaje a Malvinas. Ya habían cancelado el viaje el Aida Cara y del Veendam, con excusas que no convencieron a los isleños, porque las noticias se conocieron en el marco del ataque con bombas molotov que la agrupación Quebracho encabezó el lunes pasado contra una agencia de viajes, en la zona de Retiro, que vende paquetes turísticos en cruceros e incluye entre sus puertos a las Malvinas. Ello encendió al gobierno británico, que amenazó con ir a la Unión Europea para que analizara llevar el caso a la Organización Mundial del Comercio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario