Fernando Petrella, embajador y ex vicecanciller del gobierno de Carlos Menem, analiza la relación con los isleños y la política exterior argentina, a 35 años del conflicto armado.
"Estamos en un momento bastante interesante que no tenemos que malograr. Si no podemos avanzar mejor detenernos, pero no crear situaciones de disputa o maltrato a la parte humana", sugiere. Y afirma que una política exterior firme es aquella que usa eficientemente sus recursos para lograr objetivos "paso a paso".
Petrella sostiene que "hay que acordarse que la causa Malvinas no es una cuestión importante para el mundo, pero la Argentina la ha universalizado de una enorme manera".

Para el ex embajador ante las Naciones Unidas, sin embargo, el camino para un avance en el diálogo parece haber comenzado: "Si la argentina vuelve a ser el país que todos soñamos que tiene que ser -porque tiene todas esas posibilidades y toda esa potencialidad-, la solución podría llegar en no mucho tiempo".
El ex vicecanciller advierte que "en el sistema internacional no hay santos, cada uno tiene que defender sus intereses y cada uno tiene que detectar cuándo la otra parte -por alguna razón que no depende de uno sino que depende del sistema-, afloja en algo. Y ese es el momento de avanzar".
La política exterior que nuestro país tuvo en los últimos años, no ayudó a crear las condiciones de diálogo: "Algunas actitudes argentinas recientes -y a veces muy próximas- parecen dictadas por aquellos que nos llevaron a la guerra. Y nosotros tenemos que recordar que los héroes que están enterrados en Malvinas no quisieron ir a la guerra. Esos oficiales, suboficiales y soldados que murieron, que recibieron el homenaje de las Fuerzas Armadas británicas, fueron a una guerra a la que no habían decidido ir. Consecuentemente no tenemos que justificar posiciones extremas sobre la base que estamos honrando a los muertos. Porque a los muertos los honramos rezando por ellos, reconociendo el sacrificio inmenso que hicieron en una guerra injusta y totalmente innecesaria".
Para lograr objetivos en la causa Malvinas, el ex vicecanciller sostiene que es importantísimo tener tres puntos en cuenta: "No hubo un solo caso colonial que se resolviese de manera sustentable sin por lo menos tener en cuenta tres factores fundamentales. El primero, proteger a las minorías; el segundo, preservar intereses; y el tercero proyectar emprendimientos comunes a futuro".