“La gesta de Malvinas es abstracta pero los soldados no. Y los usan”
POR ALEJANDRA RODRÍGUEZ BALLESTER-Clarin
Después de fiesta. Fernando Monacelli ayer, apenas horas después de haber recibido el Premio./ARIEL GRINBERG
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01/11/12 – Clarin
La sonrisa de Fernando Monacelli tiene el tamaño de su esperanza –una esperanza gestada durante siete años, de 2005 a 2012, la primera y la segunda vez que se presentó en elPremio Clarín de Novela . Y, en este caso, la segunda fue la vencida. Fue precisamente la escritora Claudia Piñeiro, ganadora en 2005 y ahora parte del jurado, junto al escritor español Juan Cruz y al peruano Santiago Roncagliolo, quien le entregó la estatuilla dorada por su novela Sobrevivientes . Una balsa que aparece en la Antártida, 25 años después de la guerra de Malvinas, con los cuerpos congelados de tres conscriptos del crucero Belgrano, da inicio a la historia. El hallazgo aporta, además, el dato de que uno de los soldados tenía un hijo por nacer, cuya búsqueda emprende la abuela con ayuda de una periodista. En el relato se cruzan la tragedia sin sentido de la guerra con la crisis de 2001 y sus secuelas de abandono, muerte y locura pero también los intentos de seguir adelante, basados en lazos humanos y solidarios. “Es una historia que te abraza, es un retrato de las cicatrices del pasado de la Argentina ”, dijo Roncagliolo en la ceremonia del martes en la Usina del Arte. Al día siguiente, los ojos de Monacelli brillan mientras recuerda el momento de la entrega. “No suelo tener expectativas sobre mí mismo, pero en este caso sí las tenía. Y cuando dijeron el nombre de mi novela fue un golpe emocional muy grande”, dice este escritor y periodista bahiense. La idea disparadora de la novela, cuenta, surgió hace varios años. “Un amigo mío pensó en hacer una película sobre el crucero Belgrano como símbolo de la unión nacional . Él tuvo la idea de la balsa en la que aparece un soldado congelado y la búsqueda del nieto. En ese momento escribí 30 páginas y la dejé; me puse a escribir otra novela. Cuando la retomé, quise escribir otra cosa. Una novela humana, sobre gente que trata de salir de la deriva de sus vidas individuales.
–La novela presenta situaciones traumáticas relacionadas con la historia reciente. ¿Por qué hiciste esos cruces?
–La idea de Sobrevivientes es que, en algún momento dado, todos estamos a la deriva, a todos nos rodean océanos de incertidumbre. El individuo está rodeado por fuerzas que no puede manejar y, desde ahí, construye su supervivencia. No hay mucha diferencia entre un tipo en una balsa a merced de las olas y un padre de familia que en 2001 se había quedado sin trabajo , sin ahorros. Ambos tienen la necesidad de sobrevivir.
–¿Y qué es lo que mueve esa voluntad de supervivencia?
–Yo creo que el hombre es capaz de sobrevivir cuando da. No es cuando consigue un salvavidas sino cuando lo da. El individuo se pone por encima de la tormenta que puede ser cualquier evento social y da.
–Hay personajes femeninos muy verosímiles, al punto que la novela parece escrita por una mujer. ¿Cómo es ponerse tanto en la piel de una mujer?
–Está bueno. Me pongo en la piel de las mujeres desde la maternidad, soy un padre muy maternal. Esos son los ojos desde donde yo puedo ver a través de mis personajes femeninos. Y la verdad es que en los naufragios generales, en las crisis sociales grandes, las mujeres son muy sobrevivientes.
–Yendo a la historia de Malvinas, ese cuerpo que emerge después de 25 años parece una herida que no ha cerrado.
–En Bahía Blanca hay un monumento a las Malvinas que es atacado una vez por mes. Se habla de héroes pero no de actos heroicos concretos. No hay necesidad de condenar a esos chicos a ser víctimas de vandalismo en virtud de que no se ha hablado lo suficiente de Malvinas y no se ha hablado de las personas. Ir a la guerra es lo peor que le puede pasar a un país pero los pueblos no pueden olvidar a los individuos. La gesta de Malvinas es una abstracción pero los soldados no. Y los usan.
–Los usaron, en primer término, para tapar una dictadura.
–Los usaron para tapar la dictadura, los escondieron para olvidar el episodio. Cada vez que alguien los necesita para reafirmar un mal entendido sentido de patria, los usan. Son individuos a los que les tocó pasar por algo y está mal que se los olvide como personas.
–También aparece el personaje del ex combatiente loco, como secuela de la guerra.
–Hay muchos veteranos que deambulan, de hecho el episodio del veterano rompiendo las tumbas es real, sucedió el año pasado. En la novela quise mostrar que el que sufre siempre es el individuo, no el emergente de un proceso social.
–También aparece la figura de la abuela que busca a su nieto, nieto cuya identidad ha sido sustraída. Es un calco de la situación de Abuelas de Plaza de Mayo.
-Sí. En mi novela La mirada del ciervo , el protagonista es un hijo de desaparecidos que tiene contacto con Abuelas. Pero en este caso, es otra abuela, con un drama similar, aunque con el mismo nivel de sufrimiento.
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