martes, 25 de mayo de 2010

LA REACCION EN LAS ISLAS

Los kelpers creen que Argentina quiere hundir su economía
Dicen que buscan convertirla en colonia.
Y que el discurso del gobierno es "basura".
Por: Natasha Niebieskikwiat
Clarin 19 de Mayo

Su país quiere el naufragio de nuestra economía y su gobierno, que seamos una colonia argentina", afirmaba ayer por teléfono a este diario, desde la capital de las Malvinas, Bill Luxton, uno de los consejeros de las islas, y durante mayo al frente de este cuerpo legislativo.
Uno de las más veteranos políticos del archipiélago, ya otras veces consejero, Luxton se referió así al triángulo por el que la administración kirchnerista viene apretando las clavijas de las islas: una política más restrictiva sobre los vuelos, y sobre todo, el alejamiento de la esfera de cooperación con los británicos en el área pesquera -principal ingreso de las islas por ahora--, más la ruptura total de los acuerdos hidrocarburíferos.
Sin contar además nuevas medidas nacionales de control más severas sobre los buques que en el Atlántico Sur hagan negocios con las islas justo en momentos en que éstas llevan adelante actividades petrolíferas que Argentina rechaza.
Que el Gobierno no los considere parte del diálogo de soberanía que se busca abrir con el Reino Unido ha llevado a los malvinenses a considerar este tiempo como el "más hostil" desde el final de la guerra de 1982.
Consultado ayer por Clarín sobre el discurso de la presidenta Cristina Kirchner en la cuestión Malvinas y el firme rechazo nacional a la exploración hidrocarburífera, Luxton tuvo una sentencia más que dura.
"Es siempre lo mismo, un discurso basura, sin sentido, que busca destruir nuestra economía y convertirnos en colonia argentina".
Entre tanto, "confianza" es lo que dijo sentir Luxton ante el renovado apoyo que le acaban de dar los conservadores.
"El mismo que durante todos estos años nos dieron los laboristas", apuntó.
Efectivamente, se lo dieron sin quebrar una sola vez la monolítica línea del Foreign Office en la cuestión Malvinas, sea quien sea el ocupante del 10 Downing Street.
La seguridad que arropa a los isleños es notable.
A horas desde la formación del nuevo gobierno de tories y liberaldemócratas, el auto proclamado Gobierno de las Islas Falklands le envió una carta de felicitación. En la misma, aprovecharon para dar las "gracias" al Partido Conservador -que lideró Margaret Thatcher- por los "años" de apoyo a lo que llamaron "nuestra soberanía y nuestro derecho a la libre determinación".
No es menor el dato de que el canciller del nuevo premier David Cameron, William Hague, ya estuvo en el pasado en las islas y las "conoce bien" recordaba ayer a este diario Luxton.
El consejero es prudente sobre las exploraciones petrolíferas.
Pero vehemente al condenar el apoyo de América Latina y Caribe al reclamo argentino.
Lo consideró "irracional", y "contradictorio con las posturas en favor de la democracia y los derechos humanos" que dicen tener. Recordó Luxton que para la Unión Europea las islas "son británicas".
Ahora, los isleños permanecen concentrados para el próximo "duelo" Argentina-Reino Unido ante el Comité de Descolonización de la ONU.

lunes, 24 de mayo de 2010

Reflexión

Clarin 19 Mayo 10

Conviene detenerse en el comunicado con el que respondió ayer el Foreign Office.
Reivindica el principio de autodeterminación de los isleños, mediante el cual Londres se niega a discutir soberanía.
Pero además recuerda que el Tratado de Lisboa reconoce a las Malvinas como territorio de ultramar británico.
El revés más duro que ha sufrido la posición argentina desde la guerra.
La única política de Estado que reconoce la Argentina merece la oportunidad de convocar a un grupo de reflexión -de "sabios" nacionales, a semejanza del de la UE- para que a largo plazo aporte ideas para salir de la encerrona.
Hace falta coraje, desprendimiento e imaginación.

domingo, 23 de mayo de 2010

Cruce de Cristina y Londres por la soberanía

En la cumbre entre Europa y Latinoamérica la Presidenta reivindicó el histórico reclamo argentino por las islas.

Desde Londres hubo una réplica rápida y cortante: la soberanía sólo se discutirá si hay un pedido de los kelpers.
Cristina retrucó: "Es una equivocación".
Por: Leonardo Mindez . Madrid, enviado especial. Clarin 19 Mayo 2010

El reverdecido ping pong diplomático entre Argentina y Gran Bretaña por Malvinas tuvo ayer un escenario europeo. Todo ocurrió en un intervalo de ocho horas, las que fueron del inicio al fin de la Cumbre América Latina y el Caribe-UE en Madrid.Cristina Kirchner fue la encargada de abrir el fuego.
Tal como se había anticipado en Buenos Aires, la Presidenta trajo aquí el reclamo soberano que volvió a primer plano de la política exterior argentina desde que Gran Bretaña retomó la exploración petrolera en las aguas circundantes al archipiélago. "Por favor, reanudemos nuestras negociaciones en relación a la soberanía de las islas Malvinas tal cual lo impone la resolución que se dictó en el año 1965 en Naciones Unidas y que aún sigue inclumplida", reclamó la mandataria argentina en pleno discurso inaugural de la Cumbre, despertando aplausos de algunas delegaciones latinoamericanas y la sorpresa de los europeos.
"Somos un país de paz", recordó Cristina. "No se nos puede cargar en nuestra cuenta lo sucedido en dictaduras militares que nada han tenido que ver con la idiosincracia de nuestro países", esgrimió, en una versión discutible de la historia, pero que intentó desbaratar el fantasma belicista que hoy agitan sectores conservadores en el Reino Unido.
Cristina apeló a una de sus muletillas discursivas cuando pidió "acabar con los dobles estándares", para que "absolutamente todos los países del mundo quedemos sujetos a las resoluciones de Naciones Unidas".
La inmediata respuesta no llegó de parte del flamante premier británico, David Cameron, que no asistió a esta Cumbre. Ni siquiera estuvo a cargo de William Hague, el canciller que pasó por Madrid pero se retiró temprano.
Aquí quedó sólo el secretario de asuntos latinoamericanos del Foreign Office, Jeremy Browne, pero no abrió la boca. Con el evidente objetivo diplomático de bajarle el rango a la protesta y no legitimar este foro como lugar de discusión, mandó a distribuir de inmediato un comunicado con su firma desde Londres.
"No tenemos dudas sobre nuestra soberanía sobre las Falklands", dice el texto, que reivindica el principio de la "autodeterminación" y advierte que "no puede haber negociación sobre soberanía, al menos hasta que lo deseen los habitantes de las islas".
Cristina fue informada de inmediato al respecto y devolvió la pelota al caer la tarde, en la conferencia de prensa de cierre de la Cumbre.
Calificó la respuesta británica como una "equivocación" pues rechaza "una propuesta de la ONU, no de Argentina". "Negarse al diálogo no habla de alguien que quiera formar parte de una sociedad sujeta al derecho internacional", insistió Cristina.
Más allá del conocido apoyo latinoamericano, la Presidenta no podía esperar aquí otra cosa que hacer oír su reclamo. Las Malvinas están incorporadas como territorio británico de ultramar en el Tratado de Lisboa, que funciona como una suerte de Constitución europea.
A eso también hizo referencia el comunicado que partió de Londres.Por eso, aun los países del viejo continente más cercanos al reclamo argentino, aparecen atados de pies y manos.
"España también tiene un diferendo histórico con Gran Bretaña (por Gibraltar) pero nunca planteamos la discusión en la Unión Europea, hay otros lugares para eso", había señalado hace pocos días antes ante Clarín el embajador español en Buenos Aires, Rafael Estrella, anticipando que no llegaría muy lejos Argentina con su reclamo en la Cumbre.
Con todo, ya por la noche, fuentes de la delegación argentina transmitieron a Clarín su satisfacción por la visibilidad que había vuelto a tener la disputa por la soberanía de las islas y adelantaban que el próximo paso será redoblar el reclamo en el comité de descolonización de la ONU.
Todavía no sabían que el chileno Sebastían Piñera también había decidido sacar de su valija una vieja disputa territorial con Argentina.

sábado, 22 de mayo de 2010

Cruce en Europa entre Cristina y el gobierno británico

EL VIAJE PRESIDENCIAL:
LA ARGENTINA LLEVO EL RECLAMO A LA CUMBRE UNION EUROPEA-AMERICA LATINA Y EL CARIBE

Malvinas: La Presidenta pidió a Londres retomar las negociaciones por la soberanía.
"Somos un país de paz", dijo.
La Cancillería británica le respondió con un comunicado:
"No puede haber negociación; no tenemos dudas sobre nuestra soberanía".
Por: Leonardo Mindez Fuente: MADRID. ENVIADO ESPECIAL
Clarin 19 de Mayo de 2010

El reverdecido ping pong diplomático entre Argentina y Gran Bretaña por Malvinas tuvo ayer un escenario europeo. Todo ocurrió en un intervalo de ocho horas, las que fueron del inicio al fin de la Cumbre América Latina y el Caribe-UE en Madrid.Cristina Kirchner fue la encargada de abrir el fuego. Tal como se había anticipado en Buenos Aires, la Presidenta trajo aquí el reclamo soberano que volvió a primer plano de la política exterior argentina desde que Gran Bretaña retomó la exploración petrolera en las aguas circundantes al archipiélago.
"Por favor, reanudemos nuestras negociaciones en relación a la soberanía de las islas Malvinas tal cual lo impone la resolución que se dictó en el año 1965 en Naciones Unidas y que aún sigue inclumplida", reclamó la mandataria argentina en pleno discurso inaugural de la Cumbre, despertando aplausos de algunas delegaciones latinoamericanas y la sorpresa de los europeos.
"Somos un país de paz", recordó Cristina. "No se nos puede cargar en nuestra cuenta lo sucedido en dictaduras militares que nada han tenido que ver con la idiosincracia de nuestro países", esgrimió, en una versión discutible de la historia, pero que intentó desbaratar el fantasma belicista que hoy agitan sectores conservadores en el Reino Unido.
Cristina apeló a una de sus muletillas discursivas cuando pidió "acabar con los dobles estándares", para que "absolutamente todos los países del mundo quedemos sujetos a las resoluciones de Naciones Unidas".
La inmediata respuesta no llegó de parte del flamante premier británico, David Cameron, que no asistió a esta Cumbre. Ni siquiera estuvo a cargo de William Hague, el canciller que pasó por Madrid pero se retiró temprano.
Aquí quedó sólo el secretario de asuntos latinoamericanos del Foreign Office, Jeremy Browne, pero no abrió la boca. Con el evidente objetivo diplomático de bajarle el rango a la protesta y no legitimar este foro como lugar de discusión, mandó a distribuir de inmediato un comunicado con su firma desde Londres."No tenemos dudas sobre nuestra soberanía sobre las Falklands", dice el texto, que reivindica el principio de la "autodeterminación" y advierte que "no puede haber negociación sobre soberanía, al menos hasta que lo deseen los habitantes de las islas".Cristina fue informada de inmediato al respecto y devolvió la pelota al caer la tarde, en la conferencia de prensa de cierre de la Cumbre. Calificó la respuesta británica como una "equivocación" pues rechaza "una propuesta de la ONU, no de Argentina".
"Negarse al diálogo no habla de alguien que quiera formar parte de una sociedad sujeta al derecho internacional", insistió Cristina.
Más allá del conocido apoyo latinoamericano, la Presidenta no podía esperar aquí otra cosa que hacer oír su reclamo. Las Malvinas están incorporadas como territorio británico de ultramar en el Tratado de Lisboa, que funciona como una suerte de Constitución europea.
A eso también hizo referencia el comunicado que partió de Londres.Por eso, aun los países del viejo continente más cercanos al reclamo argentino, aparecen atados de pies y manos. "España también tiene un diferendo histórico con Gran Bretaña (por Gibraltar) pero nunca planteamos la discusión en la Unión Europea, hay otros lugares para eso", había señalado hace pocos días antes ante Clarín el embajador español en Buenos Aires, Rafael Estrella, anticipando que no llegaría muy lejos Argentina con su reclamo en la Cumbre.
Con todo, ya por la noche, fuentes de la delegación argentina transmitieron a Clarín su satisfacción por la visibilidad que había vuelto a tener la disputa por la soberanía de las islas y adelantaban que el próximo paso será redoblar el reclamo en el comité de descolonización de la ONU.
Todavía no sabían que el chileno Sebastían Piñera también había decidido sacar de su valija una vieja disputa territorial con Argentina

viernes, 21 de mayo de 2010

Malvinas, crisis y oportunidad

Por: Ricardo Kirschbaum
Fuente: EDITOR GENERAL DE CLARIN
Clarin 19 de Mayo de 2010

El flamante gobierno británico de David Cameron ha respondido con una tautología al reclamo argentino de discutir la soberanía sobre las Malvinas. Es decir, repitió el mismo argumento expresado de distinta manera.
Si los isleños quieren las negociaciones por las islas se pueden abrir, dice la alianza conservadora-liberal que acaba de desalojar del poder a los laboristas.
Pero no hay ningún indicio de que los habitantes de las Malvinas prefieran que la Argentina recupere lo que legítimamente le pertenece.
Por el contrario, lo rechazan abiertamente.
La tautología es que Londres otorgó a los isleños la ciudadanía británica después de la guerra de 1982. Ahora, otra vez, les da la llave para que sean ellos los que decidan su futuro como si fueran independientes.
¿No son acaso súbditos de Su Majestad con derechos similares a los que viven, por ejemplo, en Yorkshire o Liverpool?
Es, está claro, una forma de eludir una vez más sentarse a la mesa de negociaciones. Han reafirmado, también, el proceso de autodeterminación de las islas que sigue avanzando sin pausa.
El hallazgo de petróleo en el mar adyacente agrega motivos para que los isleños se abroquelen en su cerrada negativa a hablar con Argentina de soberanía. Pero su defensa depende de los británicos y el mantenimiento de una fuerza persuasiva en el Atlántico Sur no es algo pequeño, sobre todo en medio de una crisis económica de un alcance difícil de mensurar.
Se abre una oportunidad, entonces, para buscar replantear la política sobre Malvinas.
La Argentina se encuentra con un menú de pocas opciones frente a otro país que tiene como prioridad equilibrar su economía, afectada seriamente.
El petróleo, si su explotación es rentable, obligará a buscar acuerdos.
Argentina debe intentarlos.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Estrategia petrolera en Malvinas

El descubrimiento británico de petróleo requiere información adicional para saber si es un yacimiento comercialmente explotable

Pero Argentina debe actuar como si lo fuera, para establecer una negociación por nuestro reclamo de soberanía.
Por: Daniel Montamat
Fuente: EX PRESIDENTE DE YPF Y EX SECRETARIO DE ENERGIA
Publicado en Clarin 18 de Mayo de 2010

El descubrimiento de petróleo de calidad anunciado por Rockhopper en la cuenca Malvinas Norte (2744 metros de profundidad) tras una perforación exitosa todavía requiere información adicional para saber si se trata de un yacimiento comercialmente explotable.
La estrategia argentina para establecer una negociación que atienda nuestro reclamo de soberanía debería proceder como si lo fuera.
En una publicación especializada de noviembre del 2009, Desire Petroleum, otro licenciatario que explora en la misma cuenca Malvinas Norte, con resultados hasta ahora negativos, hizo saber que un descubrimiento de 50 millones de barriles en la zona podía explotarse con un precio de petróleo de 56 dólares por barril. Si el volumen de las reservas descubiertas alcanzaba los 400 millones de barriles, bastaba un precio de 46 dólares. Tengamos en cuenta que un yacimiento petrolero se considera gigante cuando supera los 1000 millones de barriles de reserva probada. Es decir, con un descubrimiento de no mucha importancia relativa, y pese a que los costos de explotación en la zona son muy elevados, la actividad productiva sería viable con los actuales valores de cotización del crudo.
Esto se entiende a partir del generoso reparto de renta petrolera asegurado por las licencias otorgadas por las autoridades de las islas. Por cada dólar de renta potencial (diferencia entre precios y costos) la empresa se queda con más del 50%. El resto lo apropia el gobierno (government take). Si otra fuera la distribución de la renta, es muy posible que esas aguas en conflicto y de alto riesgo exploratorio no hubieran encontrado inversores dispuestos a asumir la empresa de investigar el potencial de sus cuencas. Es difícil pensar que fondos del Tesoro inglés, que hasta ahora se hacen cargo del presupuesto de defensa de las islas, hubieran suplido la ausencia de esos capitales privados.
La apropiación y el reparto de la renta del petróleo y el gas rigen el negocio petrolero en todo el mundo. El enfoque de la renta en la exploración y explotación del petróleo que puede existir en nuestro mar continental, y que es posible que comience a explotarse en aguas en conflicto de Malvinas, debería constituir el eje de una nueva estrategia para negociar con los ingleses.
El planteo lo hicimos con Daniel Kerner, del prestigioso Eurasia Group, en una nota de opinión conjunta que publicó The Guardian (4/04/10) y que resumió Clarín en su columna "Cómo nos ven" (6-04-10). Allí avalamos la necesidad argentina de dificultar las tareas de exploración y explotación de petróleo (y/o gas natural) en las aguas jurisdiccionales en conflicto, así como la postura de establecer la opción "o con nosotros, o con ellos".
Sin embargo, descartado cualquier conflicto bélico, justificamos el endurecimiento de la posición argentina en el objetivo de sentar a las dos partes en conflicto a iniciar una ronda de negociaciones. Bajo el paraguas de la soberanía, las negociaciones debían orientarse a la discusión de la renta del petróleo que puede extraerse de la zona en conflicto. La dificultad logística que impone la restricción argentina (y que hay que procurar extender a la logística de la región), afecta los costos y disminuye la renta por barril.
Si los británicos accedieran a discutir la distribución de la renta de la explotación en las aguas en conflicto, Argentina podría poner sobre la mesa de negociación la flexibilización del uso logístico y, con ello, reducción de costos y aumento de la renta a repartir. Ambos ganan, y los propios habitantes de las islas podrían interesarse en este enfoque cooperativo.
Pero la estrategia argentina necesita otra acción concomitante. Hay que sembrar de derechos el mar continental argentino, todavía subexplorado y sin conflictos jurisdiccionales. Los 8 ex Secretarios de Energía de distintas administraciones de la democracia, que hemos convergido en un documento de consensos para tener una política de Estado en el sector, también hemos suscrito otro documento instando al Gobierno Nacional y a las fuerzas políticas con representación parlamentaria a sancionar un proyecto de ley para promover una nueva política exploratoria en el mar argentino. La política exploratoria debe ser convocante de inversores nacionales y extranjeros, con énfasis en los de la región.
Acá de nuevo aparecerá el ejemplo de la experiencia comparada en los mecanismos de apropiación y distribución de renta. Habrá que considerarlos. Es cierto que hasta ahora la intervención de ENARSA (que monopoliza los bloques exploratorios off-shore) ha sido parasitaria; pero también hay que aceptar que las retenciones, los controles de precios y la discrecionalidad que afecta esta industria y su renta han sido disuasivos de inversiones de alto riesgo. Frente al hecho consumado en territorio irredento, sumemos a la legítima protesta acciones conducentes a que la contraparte se siente a negociar.

De Malvinas, petróleo y las ovejas merino

¿Cuál es la sorpresa de haber encontrado petróleo en las Islas Malvinas?

¿Acaso nos hemos olvidado de la expedición efectuada en la década del 70 por Lord Shackleton?
¿O creímos que vino como Darwin a realizar un estudio y evaluación de las condiciones climáticas para el desarrollo de las ovejas merino?
No.
La misión de Lord Shackleton fue, precisamente, para determinar si había recursos naturales importantes.
Años antes, Hunt Int'l Petroleum Company, una petrolera americana, vino haciendo prospecciones petroleras desde Río de Janeiro hasta el Estrecho de Magallanes, con importantes hallazgos de yacimientos en el lecho submarino, especialmente en la plataforma submarina Argentina.
Frente a Puerto Deseado (no sé cuántas millas mar adentro) se estimaba una reserva, en aquella época superior en tres veces a las que se encontraron en el Mar del Norte. Con una gran ventaja, la profundidad.
En el caso de la plataforma submarina (compartida en parte con el Reino Unido por su control de las Islas), la profundidad no excede de 200 metros. Una plataforma, en este caso, puede apoyarse en el lecho marino a diferencia de otros lugares del planeta, donde deben flotar ancladas con los riesgos de fugas, como en el Golfo de México.
La guerra del Atlántico Sur no fue como se dijo, sólo para probar armas de buques de guerra contra aviones.
No.
Fue para mantener el control y la presencia sobre una riquísima área en recursos hidrocarburíferos.
Norberto Fano
ngfano@argentina.com
Fuente Clarin 18 de Mayo de 2010

lunes, 17 de mayo de 2010

CRISTINA LE HABIA PEDIDO DETENER LA BUSQUEDA DE HIDROCARBUROS

Malvinas: fuerte réplica en Londres a la carta de la Presidenta a Cameron
Un vocero de la cancillería británica reivindicó su derecho a explorar petróleo


Gran Bretaña rechazó categóricamente el reclamo de la presidenta Cristina Kirchner, al flamante primer ministro británico David Cameron, para suspender de inmediato las exploraciones de gas y petróleo en aguas de las Islas Malvinas. "No tenemos dudas acerca de nuestra soberanía sobre las Falklands (Malvinas) y las áreas marítimas circundantes", informó un portavoz del Foreign Office.
"El Gobierno de las Falklands tiene el derecho a desarrollar la industria de hidrocarburos dentro de sus aguas y es una política de larga data que el gobierno de Gran Bretaña apoye esto", agregó.
La respuesta de Londres se conoció un día después que la Presidenta instó a Cameron a detener las tareas de exploración de petróleo en las aguas de las Malvinas. "Espero tenga usted la posibilidad de detener estas acciones en beneficio de una fructífera cooperación con mi país", dijo una carta de la Presidenta enviada a Londres.
La Presidenta viaja a Madrid con la intención de reclamar ante la UE por la decisión unilateral británica de explorar en aguas soberanas argentinas.
En su carta a Cameron indicó que "recientemente se han iniciado acciones de exploración de hidrocarburos de manera unilateral en el área en disputa, lo que ha sido rechazado por mi gobierno". En la carta felicitó además a Cameron con motivo de su designación como primer ministro y para desearle éxito en su gestión, y ratificó su voluntad de reanudar las negociaciones sobre la soberanía.
La existencia de la carta no se hizo pública por el nuevo gobierno de coalición conservador-liberal democrático, sino a través de fuentes diplomáticas consultadas por la prensa.La exploración, que comenzó a finales de febrero en la cuenca norte del archipiélago, reavivó la tensión después de que la empresa Rockhopper anunció el 7 de mayo el primer descubrimiento comercialmente viable de Malvinas.
La compañía aseguró que se trataba de una reserva "de alta calidad", lo que hizo dispararse sus acciones en la Bolsa de Londres. En la carta a Cameron, Cristina sostuvo que la "grave crisis económica y financiera que ha afectado y sigue afectando al mundo en general y a Europa en particular, ponen en evidencia la importancia de seguir construyendo una comunidad internacional capaz de encarar con visión renovada los problemas más graves y urgentes"
"Es con ese mismo espíritu que quiero expresarle la voluntad del Gobierno argentino de reanudar el demorado proceso de negociación sobre la soberanía de las islas", sostuvo.

viernes, 14 de mayo de 2010

No debemos convivir con la militarización de Malvinas

La llegada a las Islas de soldados que se entrenarán para ir a Afganistán es un nuevo acto de hostilidad para la Argentina y para todos los países que respaldan nuestra soberanía

Por: Hipólito Solari Yrigoyen, PRESIDENTE DE LA CONVENCION NACIONAL DE LA UCR
Fuente Clarin 12 Mayo 2010

Era lo que faltaba: las islas Malvinas, la reliquia colonial del Reino Unido, ahora se utilizan para entrenar a los soldados que participarán en la guerra de Afganistán.
En una palabra sirven para cualquier cosa, menos para negociar la disputa de soberanía con la Argentina, como lo viene requiriendo las Naciones Unidas año tras año.
Aun sin mencionar los legítimos derechos de nuestra República sobre los tres archipiélagos australes en disputa -Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur-, para las autoridades británicas, sean laboristas o conservadoras, Afganistán o lo que sea, cuentan más que los muchos lazos históricos y culturales que han unido a nuestros países a través de los años.
La llegada del primer contingente de los soldados de Yorkshire a las islas es un nuevo acto de hostilidad no sólo para la Argentina sino para toda la región latinoamericana que respalda nuestra soberanía y condena el colonialismo.
Este regimiento es uno de los más grandes de la infantería del ejército británico y se compone de cuatro batallones: tres del ejército profesional y uno del ejército territorial del condado al que pertenece. El regimiento fue formado oficialmente el 6 de junio 2006.
El duque de York es el coronel jefe y el duque de Wellington es el teniente coronel subjefe. Pero los soldados de Yorkshire, seguramente, ni en las Malvinas ni en Afganistán, tendrán el gusto de ver ni de lejos a estos jefes virtuales.
Esta nueva decisión militar, totalmente ajena a la esfera de nuestra región, no es un hecho aislado. Desde el final de la infausta guerra de 1982, el colonialismo ha dedicado las islas usurpadas a fines militares con un gasto de considerables proporciones para la corona británica.
A esta política la entonces primer ministro Margaret Thatcher, que lleva sobre sus espaldas buena parte de la responsabilidad de esa guerra, la llamó Malvinas Fortaleza.
Se creó la base militar de Monte Agradable, ubicada a unos 45 km al suroeste de Puerto Argentino, que fue inaugurada en 1985 y a la que se destinó desde el inicio un número de soldados poco más o menos similar al de habitantes, pero con instalaciones con una capacidad de albergar más del doble de tropa.
La base depende de la Real Fuerza Area y está equipada en forma permanente, por lo menos, con cuatro helicópteros, un avión cisterna y otro Hércules. Además cuenta con unidades de señales, un destacamento de misiles de la Artillería Real, una unidad conjunta de comunicaciones para la guerra electrónica y el comando y control de los sistemas de la Marina, Ejército y Fuerza Aérea.
El paso del tiempo y el notorio pacifismo de la Argentina, lejos de debilitar esa política belicista, lo han ido incrementando. La base aérea cuenta con un importante aeropuerto con dos pistas de 2590 y 1595 metros respectivamente y hace pocos meses reemplazó sus viejos aviones militares Tornado F3 por modernísimos superjets Eurofighter Typhoons (Serie 2) valuados en 100 millones de dólares cada uno, que pueden volar hasta una velocidad de 2450 kms. por hora, y que, con su sistema de misiles, pueden detectar blancos a través de sensores de altísima tecnología.
Los Typhoons son aviones de caza que tienen un diseño que combina agilidad con capacidades furtivas, lo que los ha convertido en uno de los mejores aviones de combate en la actualidad. Cada unidad está equipada con dos misiles de largo alcance y otros dos de guía infrarroja de corto alcance.
El proyecto inicial de estos aviones fue impulsado por la empresa British Aerospace aunque para su construcción se apeló a capitales internacionales europeos. El inicio de la hasta ahora frustrada exploración petrolera puso en evidencia el incremento de la dotación naval en las islas. En sus aguas adyacentes se encontraron el submarino a propulsión nuclear Sceptre, equipado con torpedos anti buque Spearfish, y otros cuatro barcos de guerra: un destructor de la Marina, un buque de patrulla, un barco de encuesta y otro auxiliar.
El submarino, de 82 metros de largo, no es moderno pues fue construido en 1978, pero sí lo es su equipamiento con un sonar, periscopios de ataque y de búsqueda, de radar anticolisión y de guerra electrónica. Además, cuenta con cinco tubos de torpedos capaces de disparar el Spearfish de alto poder destructivo.
La Argentina no constituye ninguna amenaza. Nuestro justo reclamo por los territorios usurpados desde el advenimiento de la democracia el 10 de diciembre de 1983 con el presidente Raúl Alfonsín, se encuadra en los principios del derecho internacional, que destierran para siempre el uso de la fuerza.
La política de Defensa de nuestro país y todos sus actos respaldan su inequívoca política pacifista.
Nuestra diplomacia debe llevar adelante una fuerte ofensiva diplomática contra la provocación armamentista de la potencia colonial.
Hay que plantear el tema en la OEA y, con la solidaridad de los países hermanos y amigos, llevar la denuncia a las Naciones Unidas, incluyendo el Comité de Descolonización, sin perjuicio de plantearlo también en las relaciones bilaterales.
En definitiva, no podemos convivir en silencio con una militarización que incluye el peligro nuclear.
La Argentina no debe ahorrar esfuerzos para lograr que el Atlántico Sur sea una zona de paz como lo ha declarado la Asamblea General de Naciones Unidas.

miércoles, 12 de mayo de 2010

De la denuncia a la impotencia

Por: Ricardo Kirschbaum

Fuente:
EDITOR GENERAL DE CLARIN (07/05/2010)
Finalmente, descubrieron petróleo y gas en zonas adyacentes a las Malvinas.
El anuncio fue hecho en Londres por una de las empresas que está perforando off shore a 100 kilómetros de la Gran Malvina.
Los pobladores de las islas están contentos, las acciones de Rockhopper Exploration, la empresa que hace 30 días perfora el lecho marino, subieron bruscamente y el Gobierno argentino volvió a rechazar estas acciones a las que calificó de "ilegales".
Esta confirmación del hallazgo deberá ser continuada con un análisis de la sustentabilidad económica de la explotación, además de determinar la cantidad y la calidad del petróleo encontrado.La situación está cambiando cualitativamente.
La depredación pesquera a la que fue sometido el mar adyacente a las islas, luego de la guerra perdida en 1982, había comenzado a dañar los altos ingresos que tenían las islas por este recurso.Ahora, de nuevo, se refuerzan las perspectivas de autodeterminación de las islas.
El Gobierno argentino advierte que adoptará todas las medidas "que sean necesarias para impedir estas acciones ilegales en el marco del Derecho Internacional".
Es decir, todo aquello que signifique trabar la logística necesaria para facilitar la explotación de hidrocarburos y, además, aquellas cuestiones diplomáticas posibles.
La alusión al derecho internacional es transparente para hacer olvidar la opción militar, enterrada hace 28 años, y subrayar la voluntad de entablar una ofensiva pacífica por las islas.

Malvinas es una de las cuestiones que resume la esperanza y la impotencia de los argentinos.
La mera denuncia no detendrá la explotación petrolera.
Hay que pensar otras fórmulas políticas creativas que nos saquen de la parálisis.

martes, 11 de mayo de 2010

LA AVANZADA BRITANICA SOBRE LAS AGUAS EN DISPUTA

Cristina llevará el reclamo por el petróleo a la Cumbre de Madrid
Será en diez días, en el encuentro América latina-UE. Será difícil que haya eco entre los europeos.
Por: Natasha Niebieskikwiat
Clarin 07/05/2010

Madrid, próxima escala.
A la Cumbre de América latina, Caribe y Unión Europea (ALCUE) que tendrá lugar el lunes 17 y el martes 18 en la capital española, el Gobierno llevará su reclamo al Reino Unido para que abra un espacio de diálogo por la soberanía de las Malvinas, que hasta ahora niega. No será la primera vez que lo haga. Pero la tensión de este año tiene un elemento nuevo, el petróleo, como también lo tendrán la Asamblea General de la OEA, el próximo 5 y 6 de junio, y la exposición del canciller Jorge Taiana el 27 de ese mes ante el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas.
El inicio de las actividades hidrocarburíferas en la región, y el posible éxito de las mismas se sumarán a la protesta y el reclamo que en el último tiempo el Gobierno presentó en cuanto foro regional e internacional ha tenido delante.
El gobierno kirchnerista, que al romper con la "política de seducción" de los 90 niega el diálogo a los isleños como parte del conflicto, comenzó a cosechar buenos frutos en Cancún, en febrero, durante las cumbres del Grupo Río y de la CALC (que reunió a Latinoamérica y Caribe).
Allí fue el brasileño Lula da Silva el más vehemente defensor de los intereses en ese sentido de los argentinos.
El último espaldarazo tuvo lugar el martes último durante la cumbre de la Unasur, que en doblete respaldó reclamo de soberanía y condenó las actividades hidrocarburíferas en las aguas en disputa.
Se abrieron también espacios bilaterales, como el que se buscó en marzo pasado al pedir la mediación de los Estados Unidos, durante la visita a Cristina Kirchner de la secretaria de Estado Hillary Clinton a la Argentina. Pero es difícil que esta vez, en Madrid, durante la cumbre de ALCUE, el país encuentre un apoyo que sea efectivo y no retórico.
Por empezar, no será fácil convencer a la Unión Europea para que intervenga contra el inicio de las actividades petroleras de los británicos en el archipiélago. Sobre todo después de que en diciembre pasado ya entrara en vigor del Tratado de Lisboa -una suerte de constitución europea- que incorporó como un bloque al Reino Unido y los llamados Territorios de Ultramar que considera propios, como las Malvinas, las islas Georgias y las Sandwich del Sur.
Y de hecho, aunque en el plano de la OEA, como en las cumbres iberoamericanas se viene apoyando en bloque el pedido de diálogo argentino, países como Estados Unidos y España han esquivado el asunto al considerar que el conflicto de Malvinas es de carácter "bilateral" entre Argentina y Reino Unido.
De ahí también, que tanto legisladores -entre ellos Pino Solanas- o el llamado Grupo Ulises, que integra el ex diputado Mario Cafiero- vienen pidiendo al Gobierno un cambio de política exterior y de estrategia sobre la cuestión Malvinas.
Exigen más reacción y más dureza para con el Reino Unido y sus empresas, y hasta explorar los tribunales internacionales como una alternativa para llevar allí el conflicto de soberanía.

lunes, 10 de mayo de 2010

EN FAVOR DE LOS INGLESES

El Tratado de Lisboa, un revés en Europa

Por: Leonardo Mindez
Clarin 07/05/2010
El hallazgo de petróleo en las Malvinas no pudo llegar en un momento más delicado.
Es que Cristina Kirchner estará dentro de diez días en Madrid para participar de la cumbre de la Unión Europea y América latina y las Malvinas son el único territorio que ambas regiones reclaman como propio.
A pesar de los esfuerzos diplomáticos del Palacio San Martín, Argentina no puedo evitar que el 13 de diciembre de 2007, las Malvinas fueran incluidas como territorio británico en el Tratado de Lisboa.
Ese texto, firmado por los 27 países que integran la UE, vino a reemplazar a la fracasada Constitución Europea que fue rechazada por referendos en Francia y Holanda.
En el anexo dos del Tratado, donde se incluyen los países y territorios de ultramar, que se consideran parte de la UE, aparecen las Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur, así como el territorio antártico británico.
Argentina elevó su queja formal ese mismo día y la reiteró en las diversas oportunidades en que los funcionarios argentinos se encontraron con sus pares europeos.
En noviembre pasado, volvió a hacerlo con fuerza en la Cumbre Iberoamericana de Estoril, a pocos días de que el Tratado entrara en vigencia, tras la ratificación de todas las naciones europeas.
Ya con la noticia de la exploración petrolera británica en marcha en las aguas circundantes al archipiélago, Cristina Kirchner logró una contundente condena y una reivindicación de los derechos soberanos argentinos en la Cumbre de los países de América latina y el Caribe de febrero pasado. Para eso, logró por primera vez el apoyo de las ex colonias británicas del Caribe.
Con ese aval, la Presidenta llevará de nuevo el reclamo a Europa.
Y esta vez, llegará a Madrid junto a su esposo, flamante secretario general de la Unasur, que también dio su respaldo al reclamo argentino de soberanía sobre las islas en su reunión del martes pasado.
El viaje presidencial se completará con una escala en Barcelona para un encuentro con empresarios catalanes antes del regreso a Buenos Aires.

domingo, 9 de mayo de 2010

Conflicto por la búsqueda de petróleo

Kelpers advierten que tienen "fuerzas grandes" en Malvinas como para disuadir a la Argentina

El gobierno de las Islas Malvinas sumó aún más tensión al conflicto diplomático entre la Argentina y Gran Bretaña por la exploración petrolera, al advertir que cuenta con una fuerza militar "lo suficientemente grande" como para "disuadir" alguna escalada bélica.
El mismo día en que el Gobierno argentino, a través del vicecanciller Victorio Taccetti, había remarcado que siempre se evitó "el uso de la fuerza", una funcionaria malvinense lanzó la advertencia.
"Contamos con una fuerza que es claramente lo suficientemente grande para actuar como fuerza de disuasión", declaró Jan Cheek, miembro del Ejecutivo de las Islas Malvinas al diario británico The Times.
Pero enseguida aclaró: "Realmente no creo que Argentina se lance a una aventura militar. Ellos disputan nuestros derechos a los recursos naturales de las Islas, pero nosotros estamos dentro de nuestros derechos".
Además, Cheek acusó a la Argentina de "interferir" con la economía de las islas desde hace décadas y contestó así el reclamo argentino que se elevó en los últimos días tras el hallazgo de petróleo de "alta calidad" a cargo de la empresa Rockhopper Exploration en la cuenca norte del archipiélago.
También desde la Cancillería británica avalaron estos dichos al afirmar que el Reino Unido "defenderá los intereses de ultramar", según consignó la agencia internacional ANSA. (NA)
Fuente http://www.lanueva.com/hoy/nota/9bfa9a9b63/22/61483.html

Los límites

Walter Curia
Clarin 07/05/2010

El hallazgo de petróleo en Malvinas vuelve a poner a la Argentina ante sus verdaderos límites. Repasemos los tres conflictos de mayor sensibilidad de la política exterior: su denominador consiste en que nuestro país debe hacer frente a hechos consumados.
Los británicos perforan en aguas soberanas argentinas en busca de recursos naturales.
Uruguay levanta sin aviso una monumental planta productora de pasta de celulosa a orillas de un río compartido.
Irán ni siquiera responde a los pedidos para indagar a ex funcionarios sospechados de haber participado en el segundo peor atentado terrorista en América.
No son hechos aislados.
Hablan de la actual irrelevancia argentina en los asuntos internacionales, cuestión a la que han contribuido todos los sectores en los últimos 50 años.
Se ha dicho ya: la única fórmula es querer ser un mejor país.

sábado, 8 de mayo de 2010

Dura reacción Argentina

LA NOTICIA DISPARO LAS ACCIONES DE LA COMPAÑIA PETROLERA EN LONDRES

Hallan petróleo en Malvinas: dura reacción de la Argentina
La firma británica Rockhopper anunció su primer descubrimiento en la cuenca norte. "Estamos muy entusiasmados", aseguró el director de la compañía. La Cancillería lo declaró un acto "ilegal". Y reivindicó la propiedad de los recursos.
Por: Natasha Niebieskikwiat

LA PLATAFORMA BRITANICA. LA OCEAN GUARDIAN, EN AGUAS DE MALVINAS
Menos de tres meses después de que empresas del Reino Unido se lanzaran nuevamente a buscar hidrocarburos en las aguas de Malvinas, como lo hicieron sin éxito en los '90, la Rockhopper Exploration anunció ayer el hallazgo de petróleo en la cuenca que opera al norte de las islas.
A través de un comunicado firmado por el canciller Jorge Taiana, el Gobierno salió al cruce del inquietante hallazgo y de toda la actividad hidrocarburífera de los británicos en la zona de disputa que consideró como "un acto ilegal que va en contra del derecho internacional y las resoluciones de Naciones Unidas".
En el texto, la Argentina "rechaza de la manera más enérgica el intento de apoderarse ilegalmente de recursos naturales no renovables propiedad del pueblo argentino".
El inicio, en febrero, de la exploración petrolífera en Malvinas, y el endurecimiento de los controles por parte del Gobierno de los buques que operan en el zona y la presentación del reclamo de soberanía a Gran Bretaña ante cada foro internacional desató una escalada bilateral como no se vivía desde la guerra de 1982.
La Rockhopper no informó si el petróleo descubierto es "comercialmente viable".
Por el contrario manifestó que de ahora en más se concentrará en el análisis de la muestra encontrada tras 20 días de perforación de roca y arena a 2.740 metros de profundidad del Atlántico Sur. Y también que considera ahora si ciega el pozo, o lo suspende para buscar gas y petróleo en otro.
Pero el optimismo de la industria se esparció como una mecha encendida en Londres donde toda la prensa dio cuenta del asunto. Y como era de esperarse, las acciones de la compañía se dispararon un 138 por ciento.
Una analista de la Oriel Securities, una de la firmas influyentes del sector fue incluso más que optimista al afirmar al diario The Times, que el hallazgo "es muy significativo" y podría representar hasta 200 millones de barriles de petróleo que, a los precios actuales del crudo, representarían 17.000 millones de libras (U$S 25.000 millones):
Desde la Rockhopper -que tiene licencia por ahora en dos pozos- como desde el gobierno isleño también ayer hubo expresiones de victoria: "Estamos muy entusiasmados por los resultados", dijo el director de la compañía Samuel Moody.
En total silencio se mantuvo el gobierno del Reino Unido, enfrascado en sus comicios para nuevo primer ministro.
Pero también advertía ayer la prensa de ese país por el golpe de imagen que en algún sentido les representa el desastre ecológico causado en el Golfo de México por la British Petroleum.
A fines de marzo la empresa Desire Petroleum, que opera cuatro pozos en la misma cuenca norte de las islas donde está la Rockhopper -que podría acceder a dos más-, anunció el hallazgo de petróleo "comercialmente no viable".
Es decir, que la calidad o la cantidad no justifica los altísimos costos de exploración en aguas tan "difíciles" como las del Atlántico Sur. Fue el pozo Liz, que se tapó y abandonó, y con ello se desplomaron las acciones de la compañía.
La Desire como al Rockhopper operan en la misma zona y están utilizando la plataforma Ocean Guardian, que llegó a las Malvinas desde Escocia en las últimas semanas de febrero, desatando la furia de todos los sectores políticos argentinos.
Apoyan a la plataforma los buques Maersk Traveller, Maersk Pacer y Toisa Invicible. También tienen licencia en Malvinas, pero en la cuenca sur de las islas, la Bordern & Southern Petroleum, la BHP Billiton y su socia local Flakland Oil and Gas.
El descubrimiento anunciado ayer se produjo en el pozo 14/10-2, en el bloque petrolero Sea Lyon . Según la empresa, encontró petróleo en intervalos de 53 metros, con 25 metros de profundidad.
Fuente Clarin 05/05/2010

viernes, 7 de mayo de 2010

Petroleo en Malvinas

La empresa que encontró petróleo en Malvinas dice que es de alta calidad
La petrolera británica Rockhopper dijo que encontraron una reserva de alta calidad en la cuenca norte de las Islas Malvinas
Hallan petróleo en Malvinas
dura reacción de la Argentina
El Tratado de Lisboa, un revés en EuropaCristina llevará el reclamo por el petróleo a la Cumbre de Madrid
La empresa británica Rockhopper reveló hoy que el petróleo encontrado en Malvinas a través de la plataforma Ocean Guardian es de alta calidad. El hallazgo de Rockopper, anunciado ayer, fue el primero realizado en el marco del programa de exploración de hidrocarburos en el archipiélago del sur del Atlántico que es severamente cuestionado por la Argentina y que desató una escalada en las relaciones bilaterales entre el país y Gran Bretaña
"Los registros claramente indican que hemos encontrado una reserva de alta calidad, con gran porosidad y permeabilidad", afirmó el director gerente de la firma, Samuel Moody.
Las acciones de Rockhopper subían hoy más del 47 por ciento en el mercado de Londres, tras haber saltado más del 150 por ciento en la víspera tras el descubrimiento de petróleo en el pozo Sea Lion 14/10-2.
Analistas estimaron que podría haber unos 2 millones de barriles en el yacimiento. En marzo, la compañía Desire ya había anunciado el descubrimiento de un yacimiento de gas en un pozo llamado Liz, también en la cuenca norte, pero dijo que lo había abandonado porque las reservas eran de baja calidad.
Tras el anuncio de Rockhopper, los títulos de Desire Petroleum subían hoy un 11,38 por ciento. Ayer, a través de un comunicado firmado por el canciller Jorge Taiana, el Gobierno salió al cruce del hallazgo y de toda la actividad hidrocarburífera de los británicos en la zona de disputa, a las que consideró como "un acto ilegal que va en contra del derecho internacional y las resoluciones de Naciones Unidas".
En el texto de la Cancillería, la Argentina "rechaza de la manera más enérgica el intento de apoderarse ilegalmente de recursos naturales no renovables propiedad del pueblo argentino".